viernes, 13 de junio de 2014

MI VISITA A LA FERIA DEL LIBRO DE MADRID 2014





El hombre propone, Dios dispone y la rodilla de mi hija lo descompone. Así, lo que iban a ser una tarde de viernes y una mañana de domingo de visita a la Feria del Libro 2014 de Madrid, se quedó reducido a una tarde y a medio gas. Pero eso es siempre más que nada y además lo poco que pudimos hacer fue de lo más productivo, que afortunadamente llevaba mochila, porque vino cargada de libros.

Comenzamos con una parada doble, porque juntos en la misma caseta estaban Alejandro Palomas y Rafael Chirbes.
No he leído nada de Alejandro Palomas. Mi hija Teresa se ha leído El alma del mundo, aunque no era el libro que quería leer sino El tiempo que nos une, que me encargó recoger en la biblioteca pero me equivoqué y le llevé el otro. El libro que compró era el de Una madre, un libro del que hemos leído muy buenos comentarios y que según el autor es muy entretenido.
Pero, si hay que fiarse de las impresiones que te da el hablar cara a cara con un autor, de la obra de la que está enamorado es de El tiempo que nos une, una novela que nos confesó que lamentablemente está descatalogada (aunque yo la he visto en Ebook en Casa del libro), aunque no es difícil encontrar en las bibliotecas. Tomé buena nota para después de Una madre, hacerme con ésta.

De Rafael Chirbes Teresa compró En la orilla, lo último que ha publicado. Pero entre que no habíamos leído nada de él, ni el autor estaba muy expresivo, fue un visto y no visto.




De esta caseta nos fuimos a la de Hipercor, donde entre otros firmaba César Pérez Gellida. Para los que no lo conocéis, César es un caso aparte, todo un “figura” porque para empezar, en lugar de protegerse detrás del mostrador de la caseta, como he visto que hacen absolutamente todos los demás autores que firman en la Feria, él estaba fuera, donde el contacto con el público es total, sin necesidad de escorzos raros sobre el mostrador para hacerse una foto con quien se lo pida (¿habéis visto como todas las fotos que se publican los lectores están con la cabeza girada hacia un lado para aparecer en la foto?)
A César solo queríamos saludarlo, porque tenemos todos sus libros firmados. Aunque lo de saludarlo fue casi media hora de cola y diez minutos de charleta con él. Había en la cola detrás de nosotros una pareja joven en que ella estaba muy nerviosa porque no sabía qué decirle. «Tranquila -le decía yo- que César se enrolla solo.»
Hablamos un poco de su nueva novela, de la que nos dijo que estaba ya por el segundo borrador previo para que todo cuadre en su sitio (la estructura es más compleja que la de una novela negra), de lo contento que estaba y de la nueva novela de Lorenzo Silva, amigo suyo y autor del prólogo de Consummatum est.











Mientras esperábamos, Teresa se arrimó a Vanessa Montfort, la autora de La leyenda de la isla sin voz, un libro que tiene muy buena pinta y una autora muy simpática con la que Teresa habló un rato mientras yo seguía haciendo cola donde César.




Tenía ganas de que Almudena Grandes me firmase mi ejemplar de Las tres bodas de Manolita. Pero renuncié, porque la cola era de tal calibre, que no merecía la pena estar allí más de una hora de pie (y menos con la rodilla de Teresa)



Por eso nos dirigimos a nuestra última parada: la caseta de Ediciones B, donde por fin conocería a María José Moreno, la autora de Bajo los tilos, desplazada desde Córdoba para estar un ratito con sus lectores. Simpática, muy simpática. Una autora de la que tengo pendiente de leer La caricia de Tanatos, una novela que espero no pase de este verano.
Y cuando nos íbamos de allí, apareció Mayte Esteban, a la que si no pasa nada (no me atrevo a decirlo muy alto) iremos a ver el próximo viernes 13. Aproveché para darle la enhorabuena a Mayte Esteban por el premio que acaba de ganar su última novela Detrás del cristal (Mejor Novela Sentimental 2013, concedido por la web Rincón de la Novela Romántica). Y con ella hablamos de libros, ¿de qué si no?





16 comentarios:

  1. Corto pero bien aprovechado con autores muy interesantes

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  2. Sí señor, cortito pero intenso. Qué envidia dais.
    Besos

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  3. Corto pero intenso. Por una tarde así daría lo que fuera. A ver si el año que viene puede ser y vendo "la moto" mejor en casa :)

    Bs.

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  4. Que envidia!!! Poco tiempo pero pudisteis ir, me quede con todas las ganas.... Un beso

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  5. Una tarde bien aprovechada, besotes y que se mejore Teresa!!

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  6. Estupendo paseo. Siempre es un placer saludar y encontrarte con los autores que leemos durante todo el año. Me alegro que disfrutárais tanto del día.

    ¡Un beso!

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  7. Fue genial ese día en la Feria y toda una sorpresa encontraros en la caseta. Ah, y llevas razón, César se enrolla solito. ¡Es encantador!

    "Que no pase nada, que no pase nada, que no pase nada" Eso lo estaba pensando.

    ¡Besos!

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  8. Yo conozco a Mª José Moreno, qué simpática y dulce me pareció. Y bueno, yo creo que esa feria la tienen todo el año y tiene éxito. Besos!

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  9. Que suerte¡¡¡ Que bien os lo pasáis ¡¡¡

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  10. Corto, pero intenso!!!
    Tengo pendiente leer En la orilla, he leído cosas muy buenas osbre la novela.
    Si vais hoy, pasarlo bien.
    Un beso
    PD dile a Teresa que vaya a ver un fisio! ;)

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  11. Vamos, que os ha cundido la visita. La feria del Libro siempre es algo muy especial :)

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  12. Para ser poco tiempo ha estado bien aprovechada. Yo tengo que volver este último fin de semana, que me quedé hambrienta de libros...

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  13. ¡Qué bien haberlo podido disfrutar tanto!

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  14. Que bien os lo pasais, que envidia!!

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  15. ¡Que lujo estar con César! Lo pasasteis bien¿eh?

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  16. Fue una buena tarde, corta pero intensa.
    Lástima que no pudiésemos ir ningún día más.
    Un beso.

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