Mostrando entradas con la etiqueta Editorial Anagrama. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Editorial Anagrama. Mostrar todas las entradas

martes, 11 de marzo de 2025

UN AMOR (SARA MESA)

 
Un Amor
Sara Mesa
 
 
 
 

Título: Un amor
Autora: Sara Mesa
Editorial; Anagrama, 2020
Encuadernación; Tapa blanda
Páginas: 192
 
 

martes, 11 de agosto de 2020

ÁCIDO SULFÚRICO (AMÉLIE NOTHOMB)


Ácido sulfúrico
Amélie Nothomb


 Título: Ácido sulfúrico
Autora: Amélie Nothomb
Editorial: Anagrama, 2007
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 168

jueves, 3 de mayo de 2018

domingo, 31 de diciembre de 2017

LOLITA (VLADIMIR NABOKOV) (DOMINGOS DE CINE 67)

Lolita
Vladimir Nabokov




FICHA TÉCNICA

Título: Lolita
Autor: Vladimir Nabokov
Traducción: Francesc Roca
Editorial: Anagrama, 2003
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 392
PVP: 11,90 €







viernes, 15 de diciembre de 2017

LA CIUDAD BLANCA (CAROLINA RAMQVIST)

La ciudad blanca
Karolina Ramquvist



 
FICHA TÉCNICA

Título: La ciudad blanca
Autor Karolina Ramqvist
Traducción: Carmen Montes Cano
Editorial: Anagrama 2017
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 188






viernes, 21 de febrero de 2014

SABER PERDER (DAVID TRUEBA)

Fútbol, amores y otros desastres



FICHA TÉCNICA

Título: Saber perder
Autor: David Trueba
Editorial: Anagrama
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 544
PVP: 20 €






DAVID TRUEBA

David Trueba es el hermano del conocido director de cine Fernando Trueba (Two Much, La Niña de tus Ojos, Ópera Prima, El Milagro de Candeal, El Baile de la Victoria)
Su gran éxito ha tenido lugar en el año 2014 al obtener el Goya 2014 a la mejor director, mejor película y mejor guión original por Vivir es fácil con los ojos cerrados
No es ésta su primera incursión en el cine, pues tiene ya varias películas:
La buena vida (1996).
Obra maestra (2000).
Soldados de Salamina (2002).
Bienvenido a casa (2006).
La silla de Fernando (2006).
¿Qué fue de Jorge Sanz? TV (2010).
Vivir es fácil con los ojos cerrados (2014)


Como guionista, su participación también es muy interesante:
Amo tu cama rica (1991), junto con Martín Casariego y Emilio Martínez Lázaro.
Los peores años de nuestra vida (1994).
Perdita Durango (1997).
La niña de tus ojos (1998).
Balseros (2003).

Tres son sus novelas hasta ahora:
-Abierto toda la noche (1995)
-Cuatro amigos (1999)
-Saber perder (2008)






ARGUMENTO

Sylvia (si, la primera con y griega) está a punto de cumplir dieciséis años y está preparando su fiesta de cumpleaños. En realidad se trata de una fiesta-trampa, pues solo va a haber un invitado, un compañero de instituto. Pero los planes se truncan cuando es atropellada por un coche conducida por Ariel Burano, el último fichaje de un equipo madrileño de fútbol.
La cosa no es grave, pues se salda con una rotura de pierna sin más consecuencias físicas. Pero de las otras si que va a haberlas pues Sylvia y Ariel comenzarán una relación amorosa a espaldas de todo el mundo, pues él no puede comprometer su imagen pública saliendo con una menor de edad.
Lorenzo es el padre de Sylvia, que intenta recomponer su vida tras la separación de su mujer. Aunque esa recomposición no es nada fácil, pues su desesperación le lleva a cometer un asesinato.
Como las desgracias parecen no venir nunca solas, Leandro, el abuelo de Sylvia se junta con la mujer y la nieta en el hospital. Lo que parecía una simple rotura de cadera de su mujer Aurora por una caída en la bañera, esconde un proceso de cáncer terminal.

Historias de personas que se irán entremezclando unas con otras, avanzando en el difícil camino de la vida, no siempre con el éxito que se proponen.






PERSONAJES

Es sin duda lo mejor de este libro, los personajes que nos presenta, con unas historias que sin tener que ser extraordinarias, tienen la virtud de engancharme como lector.

- Ariel Burano: Toda su vida ha sido el fútbol, a pesar de la oposición de su padre que no termina de entender ese deporte ni que la gente pierda el tiempo con él. Su gran oportunidad ha llegado con su fichaje por un gran equipo de la capital madrileña, que le hace abandonar su Buenos Aires para trasladarse con sólo veinte años a Madrid.
No viene acompañado por todo un séquito familiar como han hecho otros jugadores argentinos, sino por su hermano mayor. Pero esta compañía va a durarle poco pues su hermano se mete en un lío y para proteger a Ariel debe regresar a Argentina, dejándole sólo.
El atropello de una chica del que se siente culpable, le hace acercarse a ella para pedirla disculpas. Lo que nunca había pensado es que dicho acercamiento iba a acabar en una historia de amor con una menor de edad y además con la presión de las cámaras de fotos, siempre pendientes del más mínimo desliz de un famoso.
La adaptación al fútbol español no resulta fácil y las cosas no le salen como esperaba.


Sylvia: Con sus recién cumplidos dieciséis años, no es la típica adolescente descerebrada. Vive en una situación difícil, con sus padres recién separados y la madre que se ha ido a vivir a Zaragoza, expectante ante un nuevo mundo que le va a tocar vivir, sin estar a gusto con su cuerpo y deseando conocer esa realidad llamada sexo.
Con lo que no contaba ella era con enamorarse de un futbolista, a ella que ese deporte nunca le ha gustado ni llamado la atención. Una historia de amor que sabe que ha de vivir día a día, disfrutando del presente, pues no cree que pueda tener futuro.

- Lorenzo: Se siente un fracasado en toda regla. No sólo se ha ido al garete su matrimonio, sino que su vida laboral ha terminado en total fracaso, con un negocio que le ha dejado en la ruina e incapaz a sus años de comenzar una nueva vida laboral.


Leandro: Padre de Lorenzo y abuelo de Sylvia, de entre todos los fracasados o aspirantes a fracasados, este es el personaje más llamativo, porque tras una vida llena de fracasos, o así lo ve él, a su edad no puede permitirse uno más. Y sin embargo es lo que está punto de sucederle con la muerte de su mujer Aurora. Porque no consiguió en la vida ninguno de sus objetivos. Aspiraba a ser un gran concertista de piano, algo que consiguió su amigo y compañero de infancia, y se quedó en un simple profesor de música.
«El encuentro con Aurora había sido la salvación de una amargura incontenible, la fuerza para levar adelante una existencia que no había sido la soñada». (Página 378)

A sus años, sin esperanzas, ni perspectiva ni ambiciones, sólo queda la más profunda amargura
«Se refugió en el baño y lloró frente al espejo, con amargura, al contrario de cómo lloran los bebés, con esa desesperación de los que saben que van a ser calmados. No, lloró con la sorda contención de los que ya no esperan consuelo de nadie». (Página 451)





SABER PERDER Y EL FÚTBOL

No es Saber perder un libro sobre el fútbol, pero es cierto que el fútbol es una parte importante del mismo. Eso no quiere decir que si no eres seguidor de este deporte o no te guste, no vaya a hacerlo el libro, porque lo que nos muestra es una parte del entramado de ese mundillo que no sale habitualmente a la luz, con los miedos de los jugadores, sus esperanzas, la prensa deportiva, los directivos, las juergas de chavales jóvenes que en muchos casos están desplazados muy lejos de sus hogares, el entramado económico que se mueve, etc.
Pero insisto, es sólo una pequeña parte del libro, necesaria para contarnos la historia de uno de sus protagonistas, Ariel Burano, un joven de veinte años que ha dejado Buenos Aires para venir a Madrid fichado por uno de los equipos de la capital.

He dicho uno de los equipos de la capital, porque el autor en ningún momento pone nombre a dicho equipo. Había leído que era para no cerrar puertas a ningún posible lector al decantarse por uno u otro equipo de la capital (léase Real Madrid o Atlético de Madrid, porque el Getafe no cuenta a estos efectos).
Una vez que me he leído el libro, tengo claro que ese no es el motivo, sino que poner nombre al equipo por el que ficha Ariel, sólo podría traerle problemas al autor al decir toda una serie de cosas sobre fichajes, jugadores o directivos, que de esta manera se convierten sólo en arquetipos sin que se le pueda acusar de que está hablando de tal o cual persona.
Sin embargo, a poco que seas seguidor del fútbol, queda muy claro que David Trueba se 
está refiriendo en todo momento al Real Madrid.

Veamos algunos claros ejemplos. ¿En qué equipo de la capital el portero suplente tiene el culo plano de estar sentado permanentemente en el banquillo? Porque en los últimos años muchos han sido los entrenadores del Real Madrid, pero uno solo su portero: Iker Casillas(hasta que llegó Mourinho, pero el libro es anterior)
«A su lado está Poggio el portero suplente que calienta banquillo desde hace cinco años de manera ininterrumpida, lo que me convierte en el culo mejor pagado del mundo junto al de Jennifer Lopez, asegura de sí mismo». (Página 36)

También se nos habla de un jugador que no quería cederle el número siete a la camiseta y se hace referencia a un veterano, que si analizamos lo que se dice de él, no puede ser otro que Raúl, que curiosamente tiene también cinco hijos (si bien es cierto que el quinto nació después de publicarse la novela:
«Habló de algunos jugadores, de Dani Villar, que había sido el más crítico con el fichaje de Ariel, es buena gente, pero perdió la punta física que se necesita en tu posición, da cierta pena ver arrastrarse a un tipo que es millonario por los campos de juego-: -Pero claro, retirarse es un trauma y más si tienes cinco hijos y una mujer como la suya». (Página 116)

La siguiente afirmación, no es válida para el Atlético de Madrid, que se conforma con clasificarse para la Champions o para Europa. Sólo puede hacer referencia al Real Madrid:
«Estaban sextos en la clasificación, cuando solo valía ganar». (Página 118)

Y hablando de la afición, todos sabemos que la afición del Atlético de Madrid está siempre volcada con su equipo a pesar de las múltiples trastadas que le hace, mientras que a del Real Madrid es tan exigente, que no se queda conforme con que su equipo gane los partidos. Además le exige que lo haga bonito. Una grada muy difícil de contentar:
«Ganarse a la grada es cuestión de un detalle, a veces de un azar. Hay mediocres a los que han querido a morir y genios a los que no entendieron jamás. Luego gusta mucho el populista, el que corre con el alma hacia un balón inalcanzable, el que pide al público que anime, el que abronca a sus compañeros cuando van perdiendo. Habría que sancionar a los que más sudan en los partidos». (Página 459)

Sumadle a eso un comentario con el que comienza el libro, que si bien es cierto que es válido para muchos presidentes de fútbol, es especialmente cierto en el Presidente del Real Madrid:
«El presidente era un hombre curtido en los negocios de la construcción». (Página 32)

Para rematar este capítulo futbolístico, una definición de este deporte que aparece en el libro y que tiene su miga:
«El fútbol es un deporte muy raro al que juegan unos eternos adolescentes descerebrados y millonarios, pero que mueven unas maquinarias que hacen feliz a cientos de miles de descerebrados mucho menos favorecidos económicamente». (Página 484)







IMPRESIÓN PERSONAL

Es posible que al ver tanto fútbol en este comentario, estés desechando directamente esta novela. Sería una lástima que lo hicieses, porque el fútbol es solo una parte de la novela, en la que además no es necesario entender nada de este deporte para seguirla, porque lo importante es que nos narra los sentimientos y las sensaciones de un joven chaval que está luchando por abrirse camino en ese mundo.

Como decía antes, es una historia de personajes. Personajes que tienen algo en común entre todos, y no me refiero a sus lazos familiares:El fracaso.
Me ha traído a la memoria la lectura de este libro a Los girasoles ciegos de Álvaro Méndez, porque en su día titulé el comentario del libro comoHistoria de cuatro derrotas. Y justamente aquí, vemos que todo va camino también de cuatro derrotas.
Sin embargo hay una diferencia fundamental y es que mientras que en 
Los girasoles ciegos esas derrotas eran sinónimo de amargura y desesperanza, en Saber perder hay un atisbo de que las cosas pueden cambiar, de que la derrota no es aplastante y decisiva, sino solo una etapa más en la vida.

A pesar de ser un libro triste (las derrotas siempre lo son) hay un atisbo de esperanza. De hecho el título del libro, creo que es toda una declaración de intenciones. Porque a poco que analicemos nuestra vida, veremos que está llena de derrotas. ¿Quién no ha sufrido una derrota o un fracaso en su vida? La vida no es una competición deportiva, y aunque lo de hay que saber perder suena a consejo de entrenador tras una inesperada derrota, lo cierto es que ¡ay de los que no aprendan a perder! .

Volviendo al símil futbolístico, recuerdo que Casillas, portero del Real Madrid y de la selección nacional de fútbol, cuando en el mundialito caímos derrotados en semifinales frente a Estados unidos dijo: 
«Esta derrota nos hará más fuertes de cara al futuro». Acertó y luego ganaron el Mundial. Y es que las derrotas nos enseñan nuestras limitaciones, nuestros errores, nuestros puntos débiles. De ellas puede aprenderse mucho más que con los triunfos.
Saber perder es reconocer nuestras limitaciones, pero no es darnos por derrotados, sino estar dispuestos a continuar con la batalla por la vida.
Y de eso es de lo que nos habla el libro. No hay en él ningún triunfador, pero no todos reaccionan igual frente a la derrota. Leandro siempre ha sido un perdedor y la pérdida de Aurora le va a dejar sin lo único que él considera como una victoria, cuando además ya no le queda tiempo para intentar nada en la vida. Lorenzo anda también de fracaso en fracaso, pero aún sigue intentándolo, aún quiere creer que la vida puede volver a depararle algo bueno. Sylvia y Ariel no están convencidos de que lo suyo sea un fracaso, la vida es joven para ellos y no sabe si volverá a darles otra oportunidad. En cualquier caso, han disfrutado del presente y quedan con espíritu abierto de cara al futuro.

Animaros con este libro, no quedaréis defraudados


.


VALORACIÓN: 10/10






domingo, 29 de septiembre de 2013

INTOCABLE (PHILIPPE POZZO)

Del cielo a la tierra


FICHA TÉCNICA

Autor: Philippe Pozzo di Borgo
Título: Intocable
Editorial: Anagrama
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 228
PVP: 17,90 €








PHILIPE POZZO DI BORGO

Philippe Pozzo di Borgo es hijo de dos distinguidas familias francesas y un  hombre de éxito empresarial llegando a ser el director de Champagne Pommery. Hasta que en 1993 tras un terrible accidente mientras practicaba parapente, lo dejó tetrapléjico.
Su experiencia vital quedó reflejado en un libro que bajo el título de Le second souffle fue publicado en 2001.

Este libro fue el punto de partida de una película: Intocable, estrenada en Francia en otoño de 2013. Tras el éxito de la misma, se reeditó el libro, éste que hoy os presento, con un texto adicional: El demonio de la guardia.




INTOCABLE

En este caso, primero vi la película y pasado un tiempo, no pude resistirme a leer el libro, tanto me impresionó aquella. Pero tras la lectura de Intocable, he de decir que son dos experiencias totalmente distintas y compatibles. Puedes disfrutar de la película sin haber leído el libro, puedes disfrutar del libro sin haber leído la película, o puedes disfrutar de leer el libro y ver la película, sin importar en este caso mucho cuál sea el orden en que lo hagas, porque como comentaré más adelante, son experiencias totalmente distintas aunque complementarias.

No es Intocable una autobiografía al uso, no solo por el hecho de que esté novelada, sino porque más que exponer datos, lo que expone son los sentimientos del autor. No se trata solo de los sentimientos de frustración, de desesperación,de esperanza, de ganas de vivir o morir dependiendo del momento. Lo que más me ha sorprendido es que todo el libro es una declaración de amor hacia su mujer, una mujer que lo acompaño en lo más duro de su rehabilitación, pero que a su vez estaba luchando contra la muerte, una muerte que rondaba a su puerta desde hacía tiempo en forma de un cáncer de sangre.
Es más, la novela original, sin el apéndice posterior añadido como consecuencia de la película, muy bien puede considerarse una novela de amor, con algunos momentos de un gran lirismo y un final a la altura de ese amor que el protagonista ha volcado a lo largo de todas sus paginas.
Quizás por eso, el segundo capítulo llamado El demonio de la guarda, no solo sea un añadido, sino que además lo parece. ¿Suprimible? No me atrevo a decir tanto, pero a mi entender no está a la altura de lo anterior, por más que en él tome forma la figura de Abdel, un personaje de esos en los que la realidad supera la ficción:
«Es insoportable, vanidoso, orgulloso, brutal, inconstante, humano. Sin él me habría muerto de descomposición. Abdel me ha cuidado ininterrumpidamente como si fuera un recién nacido. Atento a la menor señal, presente durante todas mis ausencias, me libró cuando estuve prisionero y me protegió cuando estaba débil. Me hizo reír cuando yo flaqueaba. Es mi demonio de la guarda(Página 106)

Una situación la que se nos narra en la novela de una gran dureza, sobre todo porque se nos muestra con un gran realismo parte del infierno interior por el que han de pasar personas, muchas de ellas con una gran vitalidad (que en cierto modo también ha sido la causante de los accidentes que han provocado su situación)que de repente se ven condenadas a una inactividad casi total.
Una situación que puede ser expuesta buscando la lágrima fácil del lector (algo que quizás hiciera insufrible su lectura) o con mucho sentido del humor, que es la línea que ha seguido el autor en este caso.
Un humor evidentemente ácido y que en algunos casos requiere las notas del traductor al hacer juegos de palabras en francés que son intraducibles:
«Entre nosotros somos los renacuajos (têtard), porque este animal como el tetra, no tiene ni brazos ni piernas. Solo menea el rabo.» (Página 26)


También está muy conseguido el contraste entre dos mundos tan contrapuestos: el del aristocrático Philippe y el del marginado Abdel. Dos intocables, de ahí el nombre de la película y ahora del libro.
No sé si en la película se me pasó por alto, pero en el prólogo de  esa edición, queda muy claro el por qué de este título:
«Los dos somos “intocables” por varias razones. Abdel de origen magrebí, se sintió marginado en Francia; al igual que a la casta de los intocables en la India, no se le puede ”tocar”, so pena de recibir un golpe, y corre tan rápido que los “maderos” -por utilizar su expresión- solo una vez consiguieron acorralarle en su larga carrera de mal chico.
En cuanto a mí, detrás de los altos muros que rodean mi mansión de París .mi prisión dorada, como dice Abdel- al abrigo de la necesidad por mi fortuna, formo parte de los “extraterrestres”;nada puede alcanzarme» (Página 10)




IMPRESIÓN PERSONAL

La novela no ha resultado ser lo que esperaba porque iba con el recuerdo de la película. Esperaba más humor. A cambio, me he encontrado con una gran historia de amor (indudablemente idealizada por la pérdida y la necesidad) y un lenguaje mucho más poético de lo que pensaba.
Hay historias en las que la realidad supera la fantasía, y ésta es sin duda una de ellas. Una historia de aceptación de la realidad, de lucha contra el pesimismo, de intentar ver la vida de un modo positivo pese a que ésta parezca empeñada en destruir todo lo que ama el protagonista.

Una novela corta, que se lee con rapidez y que, pese al tema que trata, está lejos de caer en la sensiblería. No busca la lágrima fácil del lector, sino de exponer sus sentimientos. Unos sentimientos que recorren toda la gama del espectro, desde el mayor de los abatimientos, hasta la alegría de vivir, desde la desesperanza, hasta la fe en una vida futura junto al ser amado.

Una novela pues, altamente recomendable para lectores sensibles.



Lectura facilitada por la Biblioteca Municipal de Fuenlabrada



VALORACIÓN: 9/10






LIBRO VERSUS PELÍCULA

Esta es probablemente una de esas raras ocasiones en la que es recomendable leer la novela y ver la película. Porque ambas son complementarias. Si en la novela el protagonista principal y casi único es Philippe, en la película la figura de Abdel está casi a la par.
De hecho, y pese a que en la nueva edición se le ha dedicado una parte entera del libro (unas setenta páginas) a Abdel, ese “demonio de la guarda”, tiene muchas más fuerza y humor en la película que en la novela, donde las escenas no tienen la misma garra.
Por contra, en la película se pierde prácticamente toda esa historia de amor que es el motor de la novela, se pierde todo el pasado de Philippe, nada se nos muestra de su infancia ni de su vida anterior a la salida del hospital en una silla de ruedas.
Normal, porque la película comienza con las entrevistas que Philippe está haciendo para encontrar un cuidador (una hilarante escena que en la novela se resuelve en apenas diez líneas)



Os dejo el trailer de la película por si es de vuestro interés





                   Domingos de cine (22)




Analytics