LA BIBLIOTECARIA DE AUSCHWITZ (ANTONO G. ITURBE)

Libros frente al horror



Esta reseña forma parte de una nueva lectura conjunta, en este caso organizada por Momentos de silencio compartido y O meu cartafol

Portada de La Bibliotecaria de Auschwitz

Antes de comenzar a leerla, he de reconocer que tenía ciertas dudas, o más bien diría recelos con respecto a La Bibliotecaria de Auschwitz, porque el tema del exterminio de judíos durante la Segunda Guerra Mudial, si bien es cierto que ha dado lugar a novelas universalmente conocidas como El diario de Ana Frank (al que por cierto se hace mención) o El niño del pijama de rayas, que no menciono aquí por calidad sino por ser un éxito de ventas, no es menos cierto que requieren su momento para ser leídas, pues lo quieran o no lo quieran, son relatos de una gran dureza.
No puede ser de otro modo, porque el exterminio sistemático de unos seres humanos a otros, como si de un matadero de ovejas se tratase (aunque en la novela un personaje dice con mucho humor que no es así, porque a las ovejas se las alimenta antes de ir al matadero), la máxima expresión del hombre lobo para el hombre, no puede dejar indiferente a nadie y en algunos momentos puede ser difícil de digerir.
Venía además de terminar El invierno del mundo de Ken Follet, que si bien es cierto que pasa de refilón por el tema, porque no entra directamente en ningún campo de exterminio, los capítulos dedicados a la Alemania nazi y a su represión, tanto de judíos como de opositores al régimen, fue la que menos me gustó, porque me hizo sentir muy incómodo.

Pese a iniciar la lectura con temor a lo que iba a encontrarme, he de decir que finalmente La Bibliotecaria de Auschwitz se ha convertido en una de mis mejores lecturas del 2012.



ANTONIO G. ITURBE

Nada sabía de este autor hasta la lectura de este libro, por lo que os dejo la biografía que de él pone la página de Casa del Libro:

«Antonio G. Iturbe, Zaragoza, 1967, es licenciado en Ciencias de la Información por la UAB y ha sido comentarista de libros en diversas emisoras de radio, además de miembro de la Redacción de la revista Qué Leer desde 1996, de la que actualmente es subdirector.

En 1995 publicó su primera novela: Rectos torcidos.»

ARGUMENTO

«Hay dos profesores que levantan la cabeza angustiados. Tienen en sus manos algo rigurosamente prohibido en Auschwitz y pueden condenarlos a muerte si los descubren. Esos artilugios, tan peligrosos que su posesión es motivo de la máxima pena, no se disparan ni son objetos punzantes, cortantes o contundentes. Eso que tanto temen los implacables guardias del Reich tan sólo son libros: libros viejos.»

Niños en Auschwitz

Es el bloque 31 de Auschwitz, nadie sabe si un oasis o un espejismo en medio de la barbarie. Allí se da clase a los niños. Allí existe una pequeña biblioteca de la que es responsable Dita, una adolescente que ha llegado desde Praga. Ella es la encargada de repartir los libros durante el día y esconder al acabar las clases.
«No era una biblioteca extensa. En realidad, estaba formada por ocho libros, y alguno de ellos en mal estado. Pero eran libros.»


Ocho libros de origen y materia muy diversa: Un atlas desencuadernado, un tratado elemental de geometría, la Breve historia del mundo, de H. G. Wells. una Gramática rusa, una novela en francés muy deteriorada a la que le faltaban páginas, nuevos caminos de la terapia psicoanalítica, de un profesor apellidado Freud. una novela más en ruso que no tenía tapas y una novela en checo en un estado cochambroso: Las aventuras del bravo soldado Svejk.

Cuenta también con libros vivientes, personas que conocen tan a fondo algún libro, que los cuentan como si de un cuento se tratase para deleite de aquellos que acuden a escucharlos.

¿Cómo es posible la existencia de este barracón al que acuden más de quinientos niños cuando en Auschwitz son los primeros en ir a las cámaras de gas por su improductividad? ¿Quién es ese tal Fredy Hirsh, que de apenas ser un instructor juvenil de deportes, es el responsable ahora de llevar un barracón que escamotea diariamente a la muerte a ese centenar de niños? ¿Cuál es el oscuro secreto que parece ocultar? ¿Cuánto tiempo podrá durar esa incongruente experiencia en el mayor matadero del mundo?
Para encontrar la respuesta, has de leer el libro.

LA NOVELA

Ante un tema como el de los campos de exterminio para judíos, es muy fácil caer en el exceso. Pecar de sentimentalismo, pecar de crudeza, pecar de sensiblería. Es difícil también encontrar un tema que sea original, que no haya sido tratado hasta el aburrimiento. Desde ese punto de vista, el argumento de La Bibliotecaria de Auschwitz es muy original. Bien es verdad, que lo que es original es la vida misma, que inventa unas historias que no parecen posibles. Sin embargo, todo lo que se cuenta en esta novela es cierto, está basado en hechos reales cerca de los cuales el autor de la novela tuvo oportunidad de conversar con Edita, la protagonista de los mismos.

Edita, la protagonista indiscutible de la novela, por más que Fredy Hirsh desempeñe un papel importante. Una figura la de Edita, o Dita que es como se la llama en muchos momentos de la novela, muy difícil de olvidar, por su fuerza, por su gran personalidad, por su valentía, esa valentía que como le decía Hirsh no consiste en no tener miedo, sino es seguir adelante a pesar del mismo.
Dita, poco más que una niña, pero con un amor total por los libros que la lleva a convertirse pese al riesgo que eso conlleva en la Bibliotecaria del bloque 31. En realidad como dice la novela «más que en una bibliotecaria, convirtió en enfermera de libros.»
Porque si hay algo que hace irresistible este libro, es su amor por los libros y la literatura. El libro es un bien preciado del que ni siquiera nos damos cuenta de su existencia. Una carga para muchos escolares que lo ven como un método de castigo más que como a un amigo.
En realidad los libros son peligrosísimas armas de destrucción masiva como muy bien saben los policías valencianos que cargaron contra estudiantes que iban armados con tan peligroso material. Lo que no se dan cuenta es de que lo que los libros destruyen es la ignorancia. Y cuanto menos ignorante sea un pueblo, más difícil será engañarlo y someterlo.
Muy cierta la afirmación que se recoge en el libro:
«A lo largo de la historia, todos los dictadores, tiranos y represores, fuera cual fuese su ideología, todos ellos han tenido algo en común: siempre han perseguido con saña los libros. Son muy peligrosos, hacen pensar.»

Reloj Astronómico de Praga

Dos son los libros que aparecen constantemente en la novela, copiando incluso párrafos enteros. Uno de ellos es la conocida El Conde de Montecristo de Alejandro Dumas (que lectura más peculiar para los que están encerrados en un campo de exterminio) y la otra es la para mi desconocida Las aventuras del bravo soldado Svejk de Jaroslav Hasek, pero no son los únicos que se mencionan.
Y junto a los protagonistas de carne y hueso, Praga es la otra protagonista de parte del libro, una ciudad de la que procede Edita y que es recordada en todo momento, desde aquella mañana en que el suelo tembló al entrar las tropas nazis en la ciudad, hasta aquel otro día que volvió a temblar al entrar las tropas comunistas para acabar con la primavera democrática que quería conseguir la ciudad.

Una novela realista. Por más que la protagonista se refugie en algunos momentos en recuerdos del pasado que ella ha organizado en su mente como si de un álbum de fotos se tratase, en todo momento es consciente de la dura realidad de Auschwitz donde vivir es un verbo que sólo se conjuga en presente. O aquella dura escena en la que un guardián de la SS regala una cajita de música a una prisionera de la que ha quedado enamorado y queda totalmente extrañado de la reacción pasiva de ella ante el regalo:
«¿Qué pasa? ¿No te gusta? -le pregunta azorado.
No se come -le respondió ella-.»

Una novela que invita a la rebelión contra el opresor, aunque sea con pequeños gestos como el de tener un libro, o como el de sonreír:
«En un lugar como Auschwitz donde todo está diseñado para hacer llorar, la risa es un acto de rebeldía.»

IMPRESIÓN PERSONAL

Que este libro quede incluido entre mis quince mejores libros publicados en el 2012 creo que es muy significativo. Es probable que su temática pueda de entrada provocar un cierto rechazo como me sucedió a mi. Los hechos que sucedieron en Auschwitz no son plato de gusto para nadie. Son la demostración de hasta donde puede llegar la maldad y la crueldad del hombre, de como el fanatismo es capaz de impedir el raciocinio humano y llevarlo hasta la irracionalidad total.
Por eso resulta tan reconfortante la historia de estos hombres y mujeres que frente a la barbarie y como medio de rebelión eligen el arma más odiada por los poderosos: los libros.

Consigue el autor crear una historia llena de fuerza y vitalidad gracias a unos personajes difíciles de olvidar, cargados de humanidad y creíbles en todo momento por la riqueza de matices que poseen, con sus luces y sus sombras, su heroísmo y su miedo, sus grandes verdades y sus secretos inconfesables. Personajes de verdad, de carne y hueso, lejos de esos estereotipos de cartón piedra que tanto abundan en la mala literatura.
Consigue también que ese amor que todo el libro transmite hacia la literatura, te hipnotice, te haga por momentos olvidar la dureza de lo que estás leyendo, como a aquellos niños que ante una buena historia eran capaces, siquiera fuera por unos momentos de olvidar el infierno en el que se encontraban.

Un aliciente añadido para mí han sido las descripciones de Praga, de sus calles, del Ayuntamiento Viejo con su reloj astronómico, de sus leyendas, de sus habitantes. Un lugar que me encantó en el viaje que realicé este verano y que he vuelto a revivir leyendo este libro.

Es una novela que recomiendo sin reservas, esas reservas que yo tuve y que por lo que he visto también muchos tuvisteis, asustado por la dureza de la temática que en la novela iba a tratarse. Sin embargo, el optimismo y la vitalidad de la protagonista prevalecen sobre el resto de las cosas, por lo que os animo a no dejar pasar de largo esta novela.
Una novela que cuando comencéis su lectura, os será imposible deteneros

DATOS TÉCNICOS

Editorial: Planeta
Páginas: 488
PVP: 19,90 €






VALORACIÓN: 10/10

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